noviembre 09 2016 0Comentarios
felicidad

¿quién va al psicólogo?

Siempre me ha sorprendido esa creencia popular: a los psicólogos van los locos; eso si nos atiborramos a psicofármcos todos los días prescritos por los  médicos, porque eso nos hace sentir “normales”, no como esos que van al psicólogo que si están mal de la cabeza. Por qué ir a un especialista para solucionar un problema es estar loco?,  mejor tomar  una pastillita mágica que me haga olvidar que sufro o que no estoy bien y que no me haga sentir que no soy “normal”.

Hoy mismo ha salido una noticia que revela que España es líder en el consumo de tranquilizantes de manera inapropiada de Europa, es decir, se los pedimos a alguien que los está tomando o los robamos del botiquín de nuestros abuelos o padres… por qué nos cuesta tanto enfrentarnos a nuestro dolor y buscar ayuda adecuada?. Una de las causas que creo que afectan,  que no lo  se, es solo una hípotesis, es que en este país no hay educación ni cultura de salud mental. He escuchado toda mi vida como a las personas que sufrían algún tipo de problema psicólogico se las marcaba de vagas: a esa la iba a dar yo depresión, si tuviera más que hacer ya verías como no estaba así… o era tabú: nada es que sufre de los nervios, o simplemente no se hablaba de ello por vergüenza.

Cuándo vamos a perder ese miedo cultural y vamos a normalizar el acudir al psicólogo como a otro especialista cualquiera?. Yo he ido al psicólogo y no descarto que tenga que volver porque me encuentre en una época difícil de mi vida o para crecer internamente, al igual que voy al fisioterapeuta o al gimnasio. Me da pena cuando llega alguien a mi consulta con cara de decepción y vergüenza consigo mismo por esa creencia de si tengo un problema psicólogico estoy mal de la cabeza, teniendo que ocultárse lo a familiares  amigos,  esto  dificulta su evolución.  Y solo porque no quiere ser tachado como LOCO/A.